sábado, 24 de marzo de 2012

Triceratops vs Torosaurus

    En la iconografía popular, todo el mundo conoce al famoso Triceratops, un gran dinosaurio americano que andaba a cuatro patas con sus imponentes cuernos y su collarín protector alrededor del cuello. Desgraciadamente para nosotros, este grupo de dinosaurio, pertenecientes a la familia de los ceratópsidos, no habitaron en lo que hoy es la península ibérica, o al menos no se han encontrado todavía sus restos.
    Hace algunos años salto la polémica con el Triceratops,  debido a que la ornamentación del cráneo variaba con la edad de los individuos, estos podían cambiar radicalmente de forma entre ejemplares juveniles y adultos. Basándose en esta observación, se propuso que los Triceratops y Torosaurus (otro género de ceratópsidos) eran en realidad la misma especie, siendo los ejemplares de Torosaurus las formas adultas de Triceratops. Para que este hipótesis fuera cierta, se tenían que dar tres predicciones comprobables: 1) ambas especies deberían tener similares distribuciones geográfica y estratigráficas (en el tiempo), 2) los especímenes asignados a Torosaurus debería ser más maduros que los asignados a los Triceratops, y 3) deben existir ejemplares intermedios que combinasen características de los Triceratops y los Torosaurus


Comparación de los cráneos de  (A) Triceratops y (B)Torosaurus. Imagen de Nicholas Longrich.
 
     Según un reciente trabajo publicado en la revista PlosOne, parece ser que la primera condición si se cumple, pero no queda claro que las otras predicciones hayan podido ser confirmadas por las evidencias del registro fósil. En este trabajo los paleontólogos Nicholas R. Longrich y Daniel J. Field de la Universidad de Yale (USA) estudian distintos ejemplares de Torosaurus y Triceratops, describiendo los diferentes estados ontogenéticos (del desarrollo) pudiendo identificar individuos maduros e inmaduros de ambos grupos. Por lo tanto, concluyen que ambos tipos de dinosaurios con cuernos eran en realidad géneros distintos. 

     Sin embargo, en este trabajo obvian las evidencias histológicas en las que se basan los autores que propusieron que ambos géneros pertenecían a la misma especie y que fueron publicadas en el año 2010 en la revista Journal of Vertebrate Paleontology. Seguro que seguirán saliendo nuevos capítulos de esta interesante discusión científica. Estaremos al tanto… 

Para más informacion podeis consultar los articulos originales:




sábado, 17 de marzo de 2012

Nueva web del MUPAL

     Aunque llevamos tiempo trabajando en ello, acabamos de estrenar la nueva web del Museo Paleontológico de Alpuente. Desde allí podreis acceder a toda la información sobre nuestro museo y sus actividades, así como informacion sobre el pueblo y la comarca.



ESPERAMOS QUE OS GUSTE!!!


martes, 13 de marzo de 2012

Un nuevo Pterosaurio chino

     Los pterosaurios son un grupo de reptiles arcosaurios emparentados con los dinosaurios y que dominaron los cielos del mesozoico mientras la mayoría de los dinosaurios correteaban por tierra firme. Comunmente son erróneamente identificados como “dinosaurios voladores” por el público no experto, pero queremos aprovechar esta noticia para recordaros que los Pterosurios no eran dinosaurios, aunque si sus primos hermanos.
      
     El pasado mes de febrero se publicó en la revista internacional Historical Biology el descubrimiento de un nuevo pterosaurios bautizado como Jianchangnathus robustus. El trabajo dirigido por el Dr. Wang Xiaolin, profesor del Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología (IVPP), describió un esqueleto parcial de este nuevo pterosaurio al oeste de Liaoning, China. El holotipo, el ejemplar sobre el que se basa el establecimiento de una nuevo género o especie, se encuentra en un único bloque donde se ha conservado un esqueleto parcial, con el cráneo y la mandíbula inferior, parte del cuello, aunque no se ha preservado la mayoría de la columna vertebral, y porciones de las alas y de las extremidades posteriores, incluidos los pies.


Holotipo de Jianchangnathus robustus (IVPP V16866), (a) Fotografía y (b) dibujo del esqueleto casi completo.

     Este nuevo descubrimiento aumenta la diversidad de reptiles voladores de esta región, cerca del límite Jurásico-Cretácico, lo que nos permitirá conocer mejor a este fantástico grupo de animales que compartió su explendor con los dinosaurios.

     Estamso convencidos de que en un futuro no muy lejano tambien se encontraran restos de pterosurios en Alpuente, esperemos que igual de completos que la nueva especie recientemente publicada.

martes, 6 de marzo de 2012

Los huevos más antiguos de Dinosaurios

Prácticamente todos los días salen a la luz nuevos descubrimientos sobre dinosaurios, pero no solo sobre sus huesos, sino también sobre sus huellas o huevos. Recientemente se ha publicado en la revista norteamericana Proceedings of the National Academy of Sciences, el hallazgo de los nidos con huevos de dinosaurios más antiguos del registro fósil, con una edad de 190 Millones de Años (Jurásico Inferior). Un equipo internacional de científicos, liderado por el paleontólogo canadiense Robert Reisz, de la Universidad de Toronto, han descrito al menos 10 nidos muy próximos unos de otros, con hasta 34 huevos por nido, en el Parque Nacional Golden Gate Highlands en Sudáfrica. La distribución de los nidos indica que los dinosaurios regresaron en repetidas ocasiones a poner sus huevos en el mismo lugar y probablemente se reunieron en grupos o colonias para hacerlo. Se trata por lo tanto de la primera evidencia sobre un comportamiento de este tipo en dinosaurios e incluso en vertebrados. 

Nidos de Massospondylus encontrados en Sudafrica.
Los huevos fosilizados son de Massospondylus, cuyos ejemplares adultos podrían medir hasta seis metros de longitud, lo que contrasta con las pequeñas dimensiones de los huevos, de entre seis y siete cms de diámetro. Sin embargo, a pesar del gran tamaño de los progenitores, la distribución de los huevos en los nidos sugiere, según los científicos, que las madres los habrían ordenado cuidadosamente, lo que indicaria un cierto cuidado de los mismos. Pero no solo eso, la presencia además de ejemplares de distinto tamaño en estos nidos apoyan la hipótesis de que una vez rompían el cascaron, las crías permanecían en el nido por lo menos hasta que duplicaban su tamaño, problemente bajo el cuidado de los adultos.

Reconstrucción de un nido de Massospondylus hace 190 millones de años

Los investigadores también hallaron huellas de pies y manos que dejaron en el barro algunos de las crías, lo que según los autores del trabajo significa que estos animales caminaban inicialmente con sus cuatro extremidades a diferencia de los adultos que eran bípedos. Ademas, el yacimiento de fósiles en Sudáfrica destaca por la abundancia de embriones en distintos estados de desarrollo, incluso algunos a punto de salir del cascarón, lo que permita estudiar las distintas etapas de crecimiento del embrión antes de salir del huevo.

Si estas interesado, puedes leer el artículo original en inglés aquí.

sábado, 3 de marzo de 2012

Pulgas Mesozoicas

     Las pulgas son uno de los principales grupo de insectos ectoparásitos (de la piel), estando actualmente altamente especializados en alimentarse de la sangre de aves o mamíferos, siendo por el contrario sus restos fósiles muy escaso. Pero como de costumbre, el registro fósil nos sorprende con nuevos hallazgos en yacimientos de conservación excepcional. Se acaban de publicar en la revista Nature las pulgas más antiguas del registro fósil, cuyos restos ayudaran a comprender mejor la evolución de este grupo de parásitos, así como su co-evolución con sus posibles huéspedes.

Pulgas gigantes del Cretácico inferior de Huangbanjigou (China).
 
     Un equipo liderado por Diying Huang del Instituto de Geología y Paleontología de Nanjing (China) han descubierto 9 ejemplares en diferentes yacimientos de China, abarcando desde el Jurásico Medio, hace 165 millones de años, hasta el Cretácico inferior, hace 125 millones de años, extendido por lo tanto la historia evolutiva de estos parásitos por lo menos 60 millones de años hacia atras. Los insectos descubiertos no eran como las pulgas actuales, mientras que las pulgas modernas miden entre 1 a 10 milímetros de longitud, las especies del Jurásico y Cretácico tenían entre 8 y 21 milímetros. Estas primitivas pulgas gigantes se diferencian además de las modernas en que no poseían la típicas “patas” adaptadas para saltar y que sus órganos bucales estaban armados con fuertes estructuras aserradas,  a diferencia de los sifones lisos de las modernas pulgas. 
     
     La presencia de estos órganos bucales “fuertemente armados” sugiere que estarían adaptados a perforas pieles muy duras tales como los de los dinosaurios. Aunque como los propios autores comentan, tal vez la única manera de estar seguro sería encontrar pulgas fósiles atrapadas en el acto de alimentarse de la sangre de un dinosaurio.